Por: Edgar Abel Cruz Infante, tallerista de Deportes UNLA
Hola, soy Edgar Abel Cruz Infante. Desde niño, siempre tuve dificultades de aprendizaje. Me costaba concentrarme, y el bullying que sufrí afectó mi autoestima. Pero en medio de esos desafíos, encontré algo que cambiaría mi vida: el deporte.
Mi primer acercamiento fue al boxeo, a los 10 años. Sin darme cuenta, ese sería el inicio de un camino que me llevaría a descubrir mi verdadera pasión.
A los 17 años, casi entrando a la adultez, conocí un arte marcial que me atrapó por completo: el Muay Thai, también llamado el arte de las ocho extremidades. Su combinación de puños, codos, rodillas y patadas no solo me dio disciplina y confianza, sino que me llevó a tomar una de las decisiones más importantes de mi vida: estudiar la Licenciatura en Educación Física y Deportes.
El Muay Thai es un arte marcial originario de Tailandia con más de 700 años de historia. Se caracteriza por el uso de ocho puntos de contacto: puños, codos, rodillas y piernas, lo que lo hace un deporte de combate muy completo. Además, incorpora clinch (agarres) y barridos para desestabilizar al oponente.
En competencias, los combates se desarrollan en un ring y se dividen en rounds, con puntuación basada en la efectividad de los golpes y la técnica.
Algunas de las técnicas más utilizadas son:
1. Golpes de puño: similares al boxeo, incluyendo ganchos, rectos y uppercuts.
2. Codazos: permiten cortes estratégicos y son altamente efectivos en el corto alcance.
3. Patadas: dirigidas a piernas, torso y cabeza, siendo la patada circular la más característica.
4. Rodillazos: se utilizan tanto en el clinch como a media distancia.
5. Clinch: control del oponente mediante agarres en la cabeza y el cuerpo, permitiendo golpes y barridos.
Este arte marcial no solo es efectivo en la defensa personal y la competencia, sino que también ofrece múltiples beneficios físicos y mentales:
1. Condición física: mejora la resistencia cardiovascular, la fuerza y la agilidad.
2. Disciplina y enfoque: fortalece la mente y la toma de decisiones bajo presión.
3. Confianza y autoestima: ayuda a superar inseguridades y miedos.
4. Reducción del estrés: la intensidad del entrenamiento libera endorfinas, promoviendo el bienestar emocional.
Gracias al Muay Thai, se me abrieron puertas en diversos empleos. Trabajé como coach de boxeo y gimnasia, aunque esta última no era un área que conociera bien. Sin embargo, con la guía de las personas correctas, logré desenvolverme y adquirir un gran conocimiento.
Con el tiempo, tuve la oportunidad de administrar mi propio gimnasio. No era totalmente mío, pero tenía la libertad de dar clases a mi manera. A pesar de lo gratificante que fue esa etapa, sentía que aún faltaba algo: mi sueño siempre había sido enseñar en una universidad.
Cuando se abrió la convocatoria de Jóvenes Construyendo el Futuro, descubrí que la Universidad Latina de América (UNLA) ofrecía una capacitación en el área de deportes. Sabía que esa era mi oportunidad.
Recuerdo la entrevista con la coach Obdulia. Me lanzó preguntas trampa, sentí nervios, pero respondí con seguridad. Sabía que mi conocimiento y experiencia me respaldaban, y eso me abrió las puertas.
No solo fui aceptado en la capacitación, sino que, aunque no estaba contemplado que un aprendiz diera un taller deportivo, me permitieron compartir el Muay Thai con alumnos de universidad y bachillerato. Fue un momento clave en mi vida: estaba cumpliendo mi sueño.
Desde que ingresé a la UNLA, me he sentido increíblemente cómodo y agradecido. La coach Obdulia, la coach Sofía, la coach Laura y el coach Horacio han sido piezas clave en mi desarrollo aquí. Y no puedo dejar de mencionar a don Efraín, quien se encarga del mantenimiento de las áreas deportivas. Su labor es fundamental para el crecimiento del equipo deportivo y, además, he aprendido mucho de él.
En este corto tiempo, mi experiencia en la UNLA ha sido increíble. Nunca había trabajado en un lugar donde me sintiera tan a gusto y rodeado de personas tan maravillosas. Sé que este es solo el comienzo, y estoy emocionado por lo que viene.
