Por Fabiola Mota Murillo
Rufino (2013) explica que los dos principales factores que intervienen en el estado de salud de un individuo son las características genéticas y el estilo de vida. Hay varias enfermedades que tienen bases genéticas, pero el estilo de vida que lleva una persona puede ayudar a la salud de la misma.
Las dos principales conductas que representan un peligro para la salud de una persona son el sedentarismo y la mala alimentación. La primera se refiere a las actividades que realizamos sentados, recostados o reclinados, aquellas en las que no utilizamos casi nada de energía. La mala alimentación no solo se refiere a consumir comida chatarra, sino también a no comer alimentos que aporten los nutrientes suficientes o no comer en las horas apropiadas. Lo mejor y más saludable es no dejar pasar más de seis horas sin comer, ya que puedes sufrir mareos, fatiga, gastritis, sobrepeso, falta de concentración, etcétera.
La actividad física tiene importantes beneficios para la salud del cuerpo y la mente. Según la Organización Mundial de la Salud (2020), previene y controla enfermedades, sean estas cardíacas, cerebrovasculares, diabetes o varios tipos de cáncer. También ayuda a prevenir la hipertensión, a mantener un peso corporal saludable y a mejorar la salud mental y nuestro estado de ánimo, además, refuerza la autoestima y genera autoconfianza.
Algunos de los ejercicios más comunes son caminar, trotar, correr, bailar, nadar, andar en bicicleta, etc. A estos ejercicios se les llama aeróbicos y son especialmente buenos para el corazón. Hay otros que son de estiramiento o fuerza, los cuales mantienen los músculos en buena forma y ayudan al metabolismo.
La alimentación, como ya lo mencionamos, juega un papel importante en la salud de cada persona. Una alimentación saludable aporta todos los nutrientes y la energía que un individuo necesita para mantenerse sano. Hay que tener en cuenta que alimentarse no es lo mismo que nutrirse.
A fin de tener una buena salud, se debe consumir los siguientes nutrientes:
- Proteínas: están presentes en el huevo, pescado, carnes rojas o blancas, etc.
- Carbohidratos: se pueden obtener del pan, pasta, arroz, frutas y verduras, etc.
- Grasas buenas: se obtienen del aguacate, frutos secos, etc.
- Vitaminas y minerales: se encuentran en las frutas y verduras.
- Fibra: está en las frutas y verduras, granos, etc.
- Agua: es vital para mantenerse saludable.
Cabe resaltar que todo en exceso es malo. Abusar de estos nutrientes puede traer consecuencias negativas.
Ámate lo suficiente como para llevar un estilo de vida saludable. Tu salud, cuerpo y mente te lo agradecerán.
Referencias
American Heart Association. (2016). «¿Cuál es la relación que existe entre la actividad física y la salud?». Recuperado de https://www.goredforwomen.org/es/health-topics/cardiac-rehab/getting-physically-active/whats-the-link-between-physical-activity-and-health
Notimex. (15 de septiembre de 2021). ¿Dejas de comer por varias horas? Esto es lo que le pasa a tu cuerpo. El Financiero. Recuperado de https://www.elfinanciero.com.mx/buena-vida/dejas-de-comer-por-varias-horas-expertos-tienen-algo-que-decirte/
Oncosalud. (2022). «¿Cuáles son los nutrientes que tu cuerpo necesita para mantenerse sano?». Recuperado de https://blog.oncosalud.pe/conoce-los-cinco-nutrientes-que-tu-cuerpo-necesita-para-mantenerse-sano
Organización Mundial de la Salud. (2020). «Actividad física». Recuperado de https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/physical-activity
Rufino, N. (2013). «Alimentación sana y actividad física, pareja perfecta para mejorar la calidad de vida». Building Talent. Recuperado de https://www.il3.ub.edu/blog/la-alimentacion-sana-y-actividad-fisica-para-prevencion-y-mejorar-la-calidad-de-vida-de-nuestro-cuerpo/
